sintaxis

El COMPLEMENTO INDIRECTO ✔️


A continuación, resolvemos la intriga de cómo encontrar un complemento indirecto sin morir en el intento.



complemento indirecto


En un análisis sintáctico, podemos toparnos con un complemento indirecto agazapado en la oración. En SINTAXIS PARA TORPES aprendemos a identificarlo, incluso en plena niebla.

Bueno, lo primero es responder qué es el complemento indirecto?. Pues es una función sintáctica que acompaña al verbo de la oración. La relación entre este complemento y el verbo es tal que, si el verbo indica una acción, su objeto indirecto señala al destinatario de la misma.

Escribió una carta a su amiga.

En este caso, además de la destinataria de la carta, "a su amiga" es también la persona a la que va dirigida la acción de "escribir una carta". Por tanto, su función en la oración es la de objeto indirecto.


complementos indirectos


Ahora, veamos qué categorías gramaticales pueden hacer de complementos indirectos en la oración. En realidad, no son más que dos y fáciles de encontrar.

La categoría gramatical que puede ejercer de objeto indirecto es un sintagma preposicional. Este viene encabezado siempre por la preposición "a".

Habla a sus amigas.

Este sintagma preposicional con "a" puede referirse tanto a seres animados como a seres inanimados. Es decir, la acción puede dirigirse a cualquier bicho viviente y el único requisito para que sea complemento indirecto es que lleve la preposición "a".

Ha puesto muchos inconvenientes a la propuesta.

Como decíamos antes, hay dos categorías gramaticales con la capacidad de ejercer de complemento indirecto. Ya tenemos una, la otra es la serie de pronombres le, les y se.

Le escribió una carta.

En la mayoría de análisis sintácticos que te vas a encontrar, el complemento indirecto se refiere siempre a una persona u objeto en tercera persona del singular (le) o del plural (les)... ¿Qué pasa entonces con las otras personas?

Ocurre que, ignoramos (gramaticalmente hablando) la primera persona del singular y del plural (me y nos) y la segunda persona del singular y del plural (te y os) cuando son destinatarios de la acción y su función es la de complemento indirecto. Esta función se asume y queda indiferenciada.

Me lavo los dientes.

Te afeitas la barba.

Nos quemamos la lengua.

Os corto el pelo.

Resulta obvio decir que cuando "me lavo" algo, me lo estoy haciendo "a mí" mismo. Por eso que nos concentramos sobre los pronombres "le" o "les" cuando se trata del complemento indirecto. A continuación, miramos con lupa cómo se comportan estos pronombres.


oraciones con complemento indirecto


Resulta que, si anteponemos el grupo preposicional encabezado por "a" al verbo, le ocurre algo a la oración... Justo delante del verbo, brota un pronombre como una seta en otoño.

Veamos este fenómeno de las oraciones con complemento indirecto en acción. Eso sí, todo lo que ocurra será dentro de un sintagma verbal:

He cambiado la rueda a la bici. > A la bici le he cambiado la rueda.

Igualmente, si omitimos el objeto indirecto de la frase, nos deja un rastro que podemos seguir. Se trata una vez más de los pronombres le y les, la marca tenebrosa del complemento indirecto.

Le he cambiado la rueda.

Hay situaciones en las que el complemento indirecto nos plantea cierta ambigüedad. Vamos despacio con el siguiente ejemplo:

Compramos el cuadro a mi amiga. > Le compramos el cuadro.

Con nuestro olfato de sabuesa, hemos conseguido identificar el complemento indirecto rápidamente. "A mi amiga", grupo preposicional encabezado por "a" que podemos sustituir por "le", uno más uno, objeto indirecto.

Ahora bien, la función de objeto indirecto, por sí sola, no nos revela si mi amiga es la artista que ha pintado el cuadro o si le hemos comprado un cuadro como regalo de cumpleaños. Esa ambivalencia de sentido, nos corrobora una vez más que estamos bien ante un complemento indirecto.

En todos los ejemplos de complemento directo que vienen hay un sintagma preposicional con "a" pero ninguno cumple la función de objeto indirecto.

Persiguió a la rata. > La persiguió. Complemento directo

Huele a gas. > Huele a eso. Complemento de régimen

Llegó a su hora. > Llegó así. Complemento circunstancial


frases con complemento indirecto?


Con lo que hemos visto hasta ahora, ya podemos establecer un método para analizar frases con complemento indirecto paso a paso.

  1. Lo primero, como siempre en un análisis sintáctico, es localizar el verbo y, con él, el sujeto que le suele acompañar.
  2. Acto seguido, repararemos en cualquier sintagma preposicional que venga encabezado por la preposición "a" y que puede ser el destinatario de la acción del verbo.
  3. Por último, sometemos al grupo preposicional sospechoso al siguiente checking: situamos el sintagma delante del verbo o, también, podemos quitarlo de la oración, y comprobar si en cualquiera de los dos casos aparecen los pronombres le o les. Si ocurre esto, no cabe duda de que se trata del complemento indirecto.

Eso sí, no todos los sintagmas preposicionales dentro del predicado encabezados por la preposición "a" van a ser siempre complemento indirecto, ya que pueden cumplir otras funciones en la oración. Por eso, vamos a detenernos un rato en comparar el objeto indirecto con otras funciones gramaticales.


complemento indirecto y directo


Las similitudes entre complemento indirecto y directo son tantas que es normal confundirse con ellos en una oración.

Ambos pueden estar ejercidos por un sintagma preposicional encabezado con "a". El pero es que el complemento directo se refiere en la mayoría de los casos a seres vivos y el complemento indirecto puede referirse a seres animados o inanimados indistintamente.

Esperan a la doctora. Objeto directo

Hablan a la doctora. Objeto indirecto

Otra característica que comparten es que si anteponemos ambos complementos al verbo o si tratamos de eludirlos de la oración, nos dejan una marca tenebrosa en forma de pronombre. Pues bien, la gran diferencia entre complemento indirecto y directo reside en ese pronombre.

En el caso del complemento directo, sus pronombres (lo, la, los y las) conservan el género (masculino o femenino) y el número (singular o plural) del grupo sintáctico al que sustituyen.

Entregó el paquete. Lo entregó. C. Directo

Entregó las flores. Las entregó. C. Directo

Sin embargo, el complemento indirecto solo conserva el número e ignora el género con los pronombres le o les.

Entregaron el examen a la alumna. / Entregaron el examen al alumno. Le entregaron el examen. C. Indirecto

Entregaron la copa a las deportistas. / Entregaron la medalla a los deportistas. Les entregaron la medalla. C. Indirecto

Al principio mencionamos por encima el pronombre se como categoría gramatical que también puede hacer de complemento indirecto. Pues acaba de llegar su minuto de gloria.

Ya sabemos que si ponemos cualquiera de estos dos complementos delante de un verbo, brota un pronombre como un champiñón. Pero, ¿qué pasa si anteponemos a la vez objeto indirecto y directo?

Entregaron el examen a la alumna. C. Directo + C. Indirecto

Pues que, para que no suene algo así como "lelo" sustituimos los pronombres le o les por el pronombre se si se ven cara a cara con los pronombres directos lo, la, los o las.

Le entregaron el examen. Se lo entregaron. C. Indirecto + C. Directo

Hay casos extremos en los que ambos complementos llegan a confundirse ya que los dos aparecen bajo la forma de sintagma preposicional con "a". Aunque podemos sustituirlos por pronombres para determinar cuál es el objeto directo y cuál el indirecto, en estos casos dependerá sobre todo del sentido de la frase.

Presenté a mi madre a mi amigo. Se la presenté (a mi amigo). Se lo presenté (a mi madre).


complemento indirecto y complemento de régimen


La preposición "a" nos trae por la calle de la amargura porque también puede encabezar un grupo preposicional con función de complemento de régimen.

Veamos, entonces, en qué se diferencian el complemento directo y de régimen. La principal se manifiesta cuando eludimos de la frase ambos complementos.

Faltó a su cita. Faltó a ella. Complemento de régimen

Mandó un mensaje a su madre. Le mandó un mensaje. Complemento indirecto

Asimismo, los dos complementos pueden coincidir en una oración. Veamos esta frase con complemento indirecto y de régimen.

A esa chica le huele el pelo a flores. C. Indirecto + C. Régimen

Sabemos que "a esa chica" es el complemento indirecto y "a flores" es el complemento de régimen porque al omitirlos de la frase nos dejan un regalito.

Le huele el pelo a eso. Complemento de régimen

Si les interrogamos, el objeto indirecto responderá a la pregunta ¿a quién?, mientras que el objeto preposicional responde al interrogante ¿a qué? como podemos comprobar con el ejemplo anterior.

¿A quién le huele el pelo a flores? A esa chica. Complemento indirecto

¿A qué le huele el pelo? A flores. Complemento de régimen



complementos indirecto y circunstancial


Nos queda una última función gramatical que puede estar ejercida por un sintagma preposicional con "a" por bandera y que, por tanto, puede confundirse con el complemento indirecto. Hablamos de los complementos circunstanciales.

Salimos a las siete. Complemento circunstancial

Para diferenciar complemento indirecto y circunstancial en una oración, tenemos que moverlos por la oración para ver qué ocurre. Tenemos el checking para identificar un objeto indirecto en la frase: lo anteponemos al verbo o lo eludimos de la frase y, automáticamente, aparece el pronombre le o les.

Puso un candado a la puerta. Le puso una cerradura. Complemento indirecto

En cambio, si movemos de un lado a otro el complemento circunstancial, la oración ni pestañea. Además, podemos sustituir este complemento por un adverbio y la frase se queda tan ancha.

Puso una maceta a la puerta. > Puso una maceta allí. Complemento circunstancial

Ten en cuanta que la preposición "a", como veíamos en el primer ejemplo (a las siete) puede referirse a un periodo de tiempo o hacer las veces de la preposición "en" para indicar un lugar (a la puerta).

Hay otro grupo preposicional que nunca podemos confundir con un complemento indirecto. Por mucho que esta sea el destinatario de la oración, no podemos caer en la trampa de identificar la preposición "para" con el objeto indirecto. Por mucho que sea hagamos algo "para alguien", ese alguien es siempre un complemento circunstancial.

Compramos un regalo para el bebé. Complemento circunstancial

Los grupos preposicionales con "para" no son ni serán nunca un complemento directo porque, a diferencia de lo que ocurre con esta función, no aparece ningún pronombre ni al anteponerlo al verbo ni al eludirlo de la frase.

Compramos un regalo a tu hermana. | Le compramos un regalo. Complemento indirecto

Nada impide que estos dos complementos puedan aparecer juntos en una frase.

Compramos un regalo a tu hermana para el bebé. C. Indirecto + C. Circunstancial


objeto directo


Antes hablábamos de los pronombres de objeto directo (me, te, nos o vos) y decíamos que podíamos pasar de ellos. Ahora, veamos el porqué.

Los dativos superfluos, también conocidos como incrementos átonos de interés, son pronombres que forman parte del verbo. Aparecen siempre que el sujeto de la oración es, también, la persona afectada por la acción.

Me tomé un café. Tomé café.

No te creas los bulos. No creas los bulos.

Nos temíamos lo peor. Temíamos lo peor.

Estos pronombres adosados al verbo coinciden con su sujeto morfológico así que es una pérdida de tiempo analizar si son un complemento directo o indirecto. Más aún cuando, gramaticalmente, son una traza del sujeto, con el que mantienen concordancia de persona y número.

Me estaba quieto.

Te vas de viaje.


ejemplos de complemento indirecto


Nos despedimos con una ronda de ejemplos de complemento indirecto. Fíjate, especialmente, en el primer ejemplo en el que esta función está representada por un verbo en infinitivo que hace las veces de sustantivo en la oración.

Dedicas demasiada atención a vestir bien. Complemento indirecto

La profesora propuso un debate a la clase. Complemento indirecto

La directora presentó la película a la prensa. Complemento indirecto


ejercicios con el complemento indirecto


Para finiquitar esta entrada, nos queda poner en práctica toda la teoría que acabas de digerir. Ha llegado la hora de que te enfrentes cara a cara al análisis sintáctico.

En el siguiente vídeo tutorial resolveremos ejercicios con el complemento indirecto y alucinarás a la hora de poder identificar esta función en cualquier oración que se te ponga delante.






complemento indirecto