sintaxis

La SEMÁNTICA ✔️


Vamos a explorar el universo de las palabras. Al menos, el universo conocido de todos sus significados. Hasta el infinito y más allá.



semántica


La semántica es una rama de la lingüística que se ocupa del significado de las palabras. Pero esta definición no le hace justicia.

La semántica lingüística es muchísimo más interesante que un diccionario amarillento. Piensa en la inmensidad del lenguaje y en tratar de ponerle cerco al mar de significados que supone el vocabulario de un idioma.

Encontrar un significado al significado parece una fantasía pero no lo es porque vamos a hacerlo ahora mismo. El significado, como tal, tiene tres elementos que le hacen inconfundible. A saber: significado, significante y referente.

Pues bien, el significado del significado (esto no es una muñeca rusa) es la imagen mental que produce en nuestra cabeza el objeto. Luego está el significante, que sería la representación visual o auditiva de dicho objeto.

Nos faltaría el objeto real al que se refiere la palabra que analizamos semánticamente. Este se denomina referente. Para nada una tontería el concepto de significado pero espera que hay más.


la semántica


Que sí, tú hazme caso que la semántica da para mucho. Si no era suficiente con los anteriores, vamos a diferenciar otros dos significados más.


Dicho con más precisión, las palabras pueden tener dos tipos de significado. Uno es el significado léxico. Lo tienen aquellas palabras que representan una entidad, ya sea real o imaginada. Son palabras como los sustantivos, los adjetivos, los verbos y algunos adverbios que, en definitiva, significan algo.

Pero también hay otras categorías gramaticales que carecen de este significado. En su lugar, tienen otro, el significado gramatical. Este indica cuál es la misión de esta palabra en la frase y en relación a otras palabras.

Por ejemplo, la función de las preposiciones es enlazar sintagmas mientras que las conjunciones relacionan proposiciones. Los determinantes determinan a los sustantivos y los pronombres los sustituyen. Pero ninguna de estas palabras (en, pero, la, ella) tiene un significado como tal y más allá del gramático.

Al realizar un comentario de texto también nos fijamos en dos fenómenos que afectan al léxico. Son la denotación y la connotación.

El significado denotativo, se ajusta a a la realidad y solo describe los rasgos del objeto referido que permiten identificarlo. Un plato es un plato y un vaso es un vaso, que diría el filósofo Rajoy.

Además de este significado que queda registrado en el diccionario, hay otro que le añadimos de acuerdo a nuestras circunstancias culturales. Por ejemplo, si decimos que alguien no ha roto un plato en su vida. Aquí, el significado connotativo de la palabra 'plato' deja de lado la referencia denotativa.


análisis semántico


Ya puestos, vamos a hacer un análisis semántico. Queda claro que salimos a la caza de significados y hay que seguir el rastro de cualquier relación semántica.

Los cambios semánticos pueden producirse por diferentes razones. Por ejemplo, el objeto puede desaparecer por culpa del contexto como cuando pides 'un cortado' en lugar de 'un café cortado'.

También se evitan palabras por prejuicios o convenciones sociales, por eso no le decimos 'vieja' a una persona mayor. Que no me entero yo.

Y al ser algo vivo, el idioma también está sujeto a las ocurrencias de sus hablantes y siempre surgen nuevos usos de las palabras; es el caso madrileño de 'mazo' en lugar de 'mucho'.

Así pues, hay trabajo por delante a la hora de analizar semánticamente un texto. Sobre todo, mucha atención a las figuras retóricas que vamos a enumerar ahora pera no perderlas de vista.


metáfora


Una de las transformaciones de significado más conocidas es la metáfora. Aquí el cambio semántico se produce por semejanza entre términos.

Tiene que haber una característica que permita sustituir un término real por uno imaginario. No obstante pueden darse muchas combinaciones de términos que dan a lugar a distintos tipos de metáfora.

Así pues, un término imaginario puede calificar uno real. En Su boca de fresa, el término real 'boca' se adjetiva con 'fresa', un término imaginario que representa al color rojo.

Al contrario también. Un término real que complementa uno imaginario. Como en Las perlas de tu boca, en el que se sustituye 'dientes' por un término imaginario complementado por uno real (boca).

Otras veces el término real se identifica directamente con uno imaginario. Para muestra, un verso de Machado.

Álamos que seréis mañana liras
Del viento perfumado en primavera


El poeta identifica el árbol con un instrumento musical porque el viento hará sonar sus hojas como si fuera música. Hermoso. Y también al revés. Un término imaginario que representa uno real. El genio de Lorca nos enseña esta figura literaria en el Romancero.

Por el olivar venían
Bronce y sueño, los gitanos


El significado metafórico de 'bronce y sueño' es la imagen que para el autor describe, en realidad, la piel y el alma del pueblo gitano.

De nuevo Machado nos ilustra otra clase de metáfora en la que un término real (la amapola) representa un término imaginario (crespón negro).

Amapola marchita
Negro crespón del campo


Si te molaron las metáforas, no te pierdas lo que viene a continuación.


metonimia


La alteración de significado con la metonimia es por contagio. La contigüidad de dos palabras que se usan juntas hace que una de ellas pueda tener el significado de las dos.

En base a esto, hay distintos tipos de metonimia. Se puede, para empezar, designar la parte por el todo. Como en la urgencia de llamar a la ambulancia y lo que estamos es pidiendo ayuda a los 'servicios sanitarios'.

Esta figura se denomina sinécdoque y hay más metonimias por el estilo. Otra en la que el continente representa al contenido. Como cuando te comes una bandeja, no hace falta que digas de qué porque cualquiera que esté allí sabe si era de canapés o de pastelitos.

El lugar de procedencia también puede representar al objetivo. Como el roquefort, al que ni hace falta añadirle la palabra 'queso' para saber que no estamos hablando del pueblo francés Roquefort que da nombre a esta delicatessen.

Esto también ocurre con el artista y su obra. Cuando ves un Velázquez en el museo o te ganas un Goya a la mejor interpretación.


tabú y eufemismo


También damos volantazos para evitar algunas palabras. Dependiendo del contexto, pueden sonar mal y no se usan para no incomodar a los demás.

Voy con un ejemplo tan inocente como 'culo', no sé que tiene esta palabra tabú pero se suele sustituir por variedad de eufemismos (pompis, trasero, nalgas). Cada cual más cursi.


relaciones semánticas


Antes hablamos del significado y del significante y con razón. Resulta que pueden darse unas cuantas relaciones semánticas entre palabras. Mejor dicho, relaciones entre significados y también entre significantes. Vamos a verlas.


sinonimia


La sinonimia se produce cuando dos o más significantes comparten un mismo significado. Como las palabras morir y fallecer. Decimos entonces que son sinónimos pero también tienen sus limitaciones y no siempre son intercambiables. Can y perro, por ejemplo, suena rarísimo decir tengo un can.


polisemia


La polisemia es lo contrario, un significante con dos o más significados. Se trata de un mecanismo de economía lingüística; de ahí que para ahorrar un poco la palabra 'banco' puede hacer referencia al dinero, a los peces y al asiento del parque.

Lo contrario a las palabras polisémicas sería la monosemia, con la que un significante está asociado a un único significado.


homonimia


La homonimia se produce cuando coinciden casualmente los significantes de palabras con significados distintos. El ejemplo clásico sería la palabra 'gato', pues no se han hecho chistes de mecánicos ni nada con el pobre animalito.

A su vez, las palabras homónimas pueden ser de dos tipos, dependiendo de si se escriben o si tan solo suenan igual.

Así, están las palabras homófonas. Aunque suenan igual, tienen un significado diferente. Otro clásico, vaca y baca, el animal y el portaequipajes del coche.

Luego están los homógrafos que, a pesar de escribirse igual, su significado es totalmente distinto. Es el caso de la palabra 'vino', que representa tanto a la bebida como al verbo venir.

Eso sí, no confundas la homografía con la polisemia que te veo venir.


antonimia


La antonimia es la relación entre dos significantes con el único punto de encuentro, que sus significados son contrarios el uno con el otro.

Algunos antónimos admiten cierta gradación (frío, caliente, templado). Otros, como 'comprar' y 'vender' son recíprocos y se implican mutuamente.


hiperonimia


Para que se produzca la hiperonimia es necesario que un solo significante englobe un montón de significados y significantes.

Un ejemplo de hiperónimo sería la palabra 'flor'. Esta atañe a la rosa, la margarita, el clavel, etc.

En el otro sentido, todas estas flores serían hipónimos ya que su significado queda englobado en otro mayor; el del hiperónimo.


campo semántico


Seguimos dándole vueltas al tema del significado porque el campo semántico depende de ello. Este concepto se traduce en una familia o conjunto de palabras que comparten algún raso de su significado.

Por ejemplo, si pensamos en un sustantivo colectivo como puede ser 'muebles' o 'mobiliario', nos vienen a la cabeza un montón de palabras. Tales como silla, mesa o cama.

Pero es que aún puedo afinar más y crear campos semánticos según los vayas necesitando para escribir un texto.

Ahora mismito hacemos otro grupo de palabras relacionadas semánticamente con 'asiento'. Venga, tú puedes, silla, sillón, sofá, taburete...


semantica