A nadie le gusta que le manden. Pero en la sintaxis tenemos unas proposiciones que son muy bien 'mandás'. Ven un verbo principal y agachan las orejas.
oraciones subordinadas
Las oraciones subordinadas son las oraciones compuestas que más miga tienen. Vamos despacito en SINTAXIS PARA TORPES para aprender a analizarlas.
Te aclaro ya mismo qué son las oraciones subordinadas. Cuando una oración tiene más de un verbo, puede tratarse de una oración compuesta. Ahora bien, si en esa oración podemos distinguir un verbo principal y otro verbo que depende de este, estamos ante una oración compuesta que cuenta con una subordinada.
En la mayoría de casos, las proposiciones subordinadas vienen introducidas por un nexo y su verbo es una forma personal (conjugada).
El ruido al que no hacíamos caso se hizo insoportable. Proposición subordinada adjetiva
No obstante, el verbo de la proposición subordinada puede aparecer con una forma no personal (infinitivo, participio o gerundio). El peligro aquí es confundir la proposición subordinada con las perífrasis verbales.
Vamos a recoger un paquete. Perífrasis verbal
La diferencia fundamental con una perífrasis verbal es que la proposición subordinada nunca podrá ser la proposición principal. Además, el verbo de la proposición subordinada podrá incorporar sus propios complementos.
La niña pasó la tarde aguantando a su padre. Proposición subordinada adverbial
Me disgusta haber conocido la noticia. Proposición subordinada sustantiva
tipos de oraciones subordinadas
En total, tenemos tres tipos de oraciones subordinadas. Así, podemos hablar de las proposiciones subordinadas sustantivas, las proposiciones subordinadas adjetivas y, por último, las proposiciones subordinadas adverbiales.
Aunque te explote la cabeza al leer proposición subordinada, estamos ante una construcción sintáctica más simple de lo que parece a primera vista. De hecho, no es un capricho de la gramática el hecho de que las subordinadas incorporen en su nombre las categorías gramaticales de sustantivo, adjetivo y adverbio.
Veamos, a continuación, unos cuantos ejemplos de oraciones subordinadas y estudiemos cada tipo de subordinada para saber como identificarlas sin pestañear. En cualquier caso, la proposición subordinada no deja de ser un complemento del verbo principal y, como tal, debemos analizarla.
oraciones subordinadas sustantivas
Que una proposición subordinada se denomine sustantiva quiere decir que equivale a un sustantivo o, en su defecto, a un pronombre.
Es más, el truco infalible para identificar las oraciones subordinadas sustantivas es intentar sustituirlas por el pronombre "eso"; si la proposición subordinada admite esta sustitución, acabas de demostrar gramaticalmente que se trata de una sustantiva.
Me disgusta que mientas. > Me disgusta eso. Proposición subordinada sustantiva - Sujeto
Al mismo tiempo, al comportarse como un sustantivo, las oraciones subordinadas sustantivas pueden desempeñar las mismas funciones que esta categoría gramatical.
No sé qué hacer. Proposición subordinada sustantiva - Complemento directo
De esta manera, una proposición subordinada sustantiva puede ejercer las funciones de sujeto, complemento directo e indirecto, complemento del régimen, atributo, complemento del nombre o del adjetivo.
Me alegro de que Paquita coma con nosotras. Proposición subordinada sustantiva - Complemento de régimen
oraciones subordinadas adjetivas
Como su nombre indica, las oraciones subordinadas adjetivas se comportan como un adjetivo que complementa a la proposición principal.
La canción que interpretó la cantante me encantó. Proposición subordinada adjetiva
Su función es siempre la misma, la de complemento del nombre. También es fácil identificarlas porque todas las oraciones subordinadas adjetivas cuentan con pronombre de relativo (que, cual, quien, cuyo). La única complicación que tiene analizarlas es descubrir la función que realiza dicho pronombre de acuerdo con el verbo de la proposición subordinada al que complementa.
Cortaron las flores del parque que estaban secas. Proposición subordinada adjetiva / Nexo: Sujeto
oraciones subordinadas adverbiales
Por último, tenemos las oraciones subordinadas adverbiales. Si las sustantivas admiten la sustitución por un pronombre, la mayoría de proposiciones subordinadas adverbiales se pueden sustituir por un adverbio (así).
Hazlo como te digo. > Hazlo así. Proposición subordinada adverbial
Eso sí, la mayoría admiten esta sustitución pero no todas. Cuando estudiamos los adverbios y su función de complemento circunstancial, hablábamos de realidades que no pueden ser sustituidas por adverbios por mucho que modifiquen el verbo de la misma manera.
Esto se traduce en dos clases de oraciones subordinadas adverbiales, las propias y las impropias. En este sentido, las subordinadas propias son aquellas sustituibles por un adverbio, mientras que las impropias no admiten esta sustitución.
En cuanto me senté, llamaron por teléfono. Proposición subordinada adverbial propia
El profesor volverá a explicar la frase para que nos enteremos. Proposición subordinada adverbial impropia
