Si dejas cabos sueltos es porque te faltan unos cuantos conectores. Se acabaron los argumentos a medias, vamos a aprender a darle forma a un texto con este tipo de palabras que dejan todo clarito de principio a fin.
conectores textuales
Los conectores textuales son categorías gramaticales que permiten relacionar las partes de un texto. Normalmente son preposiciones y conjunciones pero hay todo tipo de locuciones que sirven para conectar ideas.
A la hora de escribir un texto, ya vimos que tiene tres partes fundamentales. Abre con una introducción en la que planteamos un tema que se irá desarrollando hasta enredarse. Esta es la segunda etapa, el nudo, donde la tensión narrativa alcance su máximo para descender en picado hasta el desenlace final.
Igualmente, te servirán para dejar las cosas claras al resumir un texto. Aquí tienes que plantear un par de ideas, pero tiene que ser de manera ordenada y, sin duda, los conectores están para eso.
marcadores textuales
Pues este desarrollo del texto, como si fuera un viaje, se consigue por medio de estos conectores. También conocidos como marcadores textuales y son un elemento a destacar en un comentario de texto.
Lo que hacen precisamente es marcar los tiempos del texto. Escribir es una cuestión de ritmo, lo que no sé es si también bailarás mejor al lado de un conector textual.
tipos de conectores textuales
Si tuvieramos que clasificar los marcadores, deberíamos atender a lo que expresan. De hecho, los tipos de conectores textuales se establecen de acuerdo a su significado por lo que son muy variados.
De esta manera, estarían los conectores de apertura del texto, los de oposición de ideas, los que añaden información, los que ordenan párrafor, los que arrojan conclusiones, los que expresan opiniones, los que proponen nuevos temas, los que corroboran lo expuesto, los que aclaran y los que expresan consecuencias.
ejemplos de conectores textuales
Uff, pues sí que había ejemplos de conectores textuales. Aquí te propongo una lista con los más usados pero que sepas de antemano que está incompleta. Hay marcadores a tutiplén.
conectores textuales de inicio
Para romper el hielo y empezar un texto, tienes los conectores textuales de inicio. Algunos ejemplos son: antes que nada, para empezar, lo primero.
conectores textuales de opisición
Los conectores textuales de opisición añaden restricciones a las ideas que se plantean en un texto. De sobra conocidos son: pero, en cambio, por el contrario, sin embargo, no obstante, con todo, ahora bien.
conectores textuales para añadir información
Los mejores conectores textuales para añadir información son: además, igualmente, asimismo.
conectores textuales para ordenar párrafos
Entre los conectores textuales para ordenar párrafos destacan: en primer lugar, a continuación, por otro lado.
conectores textuales de finalización
Para concluir y poder finalizar el texto, usa conectores de finalización como estos: por último, finalmente, en conclusión.
conectores textuales para expresar opinión
También puedes mostrar lo que piensas con conectores para expresar opinión. Los clásicos son: en mi opinión, a mi juicio, por lo que a mí respecta.
conectores textuales para exponer
Si te aburre el asunto, puedes andar por las ramas con los conectores para exponer nuevos temas. Te sirven para ello: a propósito de, en relación a, respecto a, por lo que se refiere a.
conectores textuales para corroborar
Si quieres reforzar tu argumento, necesitas conectores para corroborar que añadan conceptos que validen la argumentación. Tales como: en realidad, de hecho, igualmente.
conectores textuales para aclarar
Si sientes que falta alguna explicación, para eso están los conectores textuales para aclarar. Dispones de: esto es, es decir, o sea, mejor dicho, por ejemplo.
conectores textuales de consecuencia
Que tampoco te falten los conectores textuales de consecuencia. Son perfectos para soltar el argumento definitivo y más convincente de todos. Toma nota de: por lo tanto, en consecuencia, por consiguiente, por todo ello.
